Infinidad de veces me ha tocado escuchar a los padres preocupados porque sus hijos sean víctimas de violencia y acoso en la escuela. Pero, como se verá en esta nota, muchas veces son los propios padres quienes, desde la inconsciencia ( o tal vez incluso desde la consciencia), incitan a sus hijos a ser agresivos defendiéndose desde la violencia, con más agresión, lo cuál, desde mi punto de vista, es un gravísimo error. A la agresión y a la violencia hay que responder con inteligencia.
