La terapia Gestalt es una magnifica opción para las personas de cualquier edad (adolescentes, adultos, adultos mayores) que se atraviesan un momento decisivo en sus vidas: descubrir su orientación sexual. Es un hecho que todos nacemos siendo parte de un género: masculino o femenino, sin embargo, la Orientación sexual es algo diferente. Llega un momento de la vida en la que nos damos cuenta que, independientemente de nuestro género y otros factores, nos atraen personas de nuestro mismo sexo. Es el momento en que se enfrenta el reto de asumir la decisión de dicha orientación lo cual, generalmente, trae consigo muchos miedos, ansiedad, confusión, pues nos damos cuenta de que este hecho no siempre es aceptado ni respetado por nuestro contexto familiar o social y, por es motivo, puede generarnos muchos conflictos con las personas más cercanas.
La Gestalt es una terapia humanista que acepta y respeta a la persona tal cual es, sin juicios ni condiciones. Todo lo contrario, la Gestalt busca que la persona sea ella misma, que sea auténtica y que se acepte tal cual es. No busca que los individuos sean todos iguales y se resignen a un statu quo sólo por el hecho de no ser rechazados. Todo lo contrario, intentamos que la persona reconozca sus recursos personales, su auto apoyo, y los recursos con los que puede contar en el ambiente (familia, amigos, compañeros, terapeuta, grupos de apoyo), para hacer valer su derecho de ser quien es sin tener que sacrificar su naturaleza para ser aceptado.
También la terapia gestalt es una excelente opción para padres, madres, hermanos, tíos o cualquier familiar que se enfrenta, con temor, al hecho de que su hijo, su hermano o cualquier otro familiar, incluso muchas veces la propia pareja, corre el riesgo de reconocer ante ellos que es homosexual. Este acontecimiento genera a la familia y al grupo mucho temor y confusión ,pues muchas veces no saben como enfrentarlo.
Es algo natural que la familia se haga expectativas en cuanto a sus miembros (que dicha persona se case, tenga hijos, haga a sus padres abuelos, etc. ), sin embargo, con el apoyo adecuado, la aceptación y validación de sus sentimientos (miedo, frustración, enojo) pueden llegar a asimilar la situación, superarla y aceptarla amorosamente, brindando su apoyo al familiar que ha tenido el valor de ser él mismo, de ser auténtico y mostrarse tal cual es, sin avergonzarse por ello.
Si tú te encuentras en cualquiera de estas situaciones (asumir tu propia homosexualidad o ser familiar de alguien que está en dicho proceso) no tienes que enfrentar solo dicha experiencia. Busca apoyo, te sentirás mejor y podrás encontrar nuevamente tu equilibrio y tu tranquilidad, brindando tu cariño y a la vez tu apoyo, a tu ser querido.
Muy buen artículo!!!!!
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