Temía estar sólo hasta que aprendí a quererme

Considero que siempre es bueno iniciar un año sin temores, con confianza y seguridad de que venceremos todos los obstáculos y alcanzaremos nuestros sueños, metas y propósitos. Es por ello que hoy, como primer texto del año, seleccioné este escrito del genio Ernest Hemingway, donde narra la manera en que él venció sus miedos.
Utilicemos este bello escrito y a su autor como modelo para superar nuestros propios miedos a la soledad, la vejez, el fracaso, el ridículo, la verdad, el odio o la muerte.
Si logramos superar nuestros miedos durante este año, podemos darnos por bien servidos, pues el miedo, es la cara opuesta del amor; si logramos trascenderlo, querrá decir que, ¡al fin!, hemos logrado encontrar el amor.
Y no olvidemos las palabras del propio Hemingway:
«Hay que vivir plenamente, porque la vida pasa pronto»:

Seguir leyendo

Tu voto:

mindfulness y gestalt

Observar: el secreto para llegar a la verdad.

En este artículo: La importancia y el poder de la observación.
«Contemplad el cielo, relajad vuestra mente y permitid que se funda con el cielo. Observad las nubes que flotan en el cielo y daos cuenta de que eso no nos exige el menor esfuerzo.
Advertid simplemente que existe una consciencia sin esfuerzo de las nubes. Y lo mismo podemos decir con respecto a los árboles, los pájaros y las piedras.
Podeís observarlos sencillamente sin realizar esfuerzo alguno. Dad un paso atrás hacia la fuente de vuestra consciencia, dad un paso hacia el Testigo y descansad en él.»

Ken Wilber.

Seguir leyendo

Tu voto:

contento_satisfeho_feliz

Merecimiento en acción

La calidad de acciones están directamente relacionadas con la autoestima La consciencia de merecimiento y la autoestima están estrechamente ligadas, cuando una persona tiene su autoestima en alto siente que se merece lo mejor que la vida tiene para ofrecer, y el sentir que se merece lo mejor, y poder disfrutarlo, aumentan su autoestima.

Seguir leyendo

Tu voto:

Demasiado difícil para lograrlo

La forma más sencilla de evitar algo que se interpone en nuestro camino para alcanzar un reto, es eliminarlo. Si se trata de palabras limitativas (y poco reales) como “demasiado, muy o mucho”, entonces, hay que eliminarla de nuestro vocabulario cotidiano.

En realidad, no hay nada que sea realmente “demasiado algo”. Es más útil asumir la responsabilidad y elegir si queremos o no hacer las cosas. Por ejemplo, si me escucho decir: “estoy demasiado viejo para empezar a hacer ejercicio” puedo intentar cambiar la frase para decir: “tengo 50 años y elijo no hacer ejercicio” o bien “tengo 70 años y elijo empezar a hacer ejercicio de manera adecuada para mi edad”.

Seguir leyendo

Tu voto:

terapia_gestalt

Yo tuve miedo hasta que aprendí…

Tuve miedo al amor, hasta que descubrí que soy digno de ser amado por lo que soy, por ser justamente como soy, y que no tengo que convertirme en otro para merecer que me quieran. También, cuando me di cuenta de que, si alguien a quien aprecio o amo se aleja, se va un ser con nombre y apellido, pero no se va con él el amor… que el amor es más que un sentimiento o un apego, es una energía que me pertenece y se genera en mi interior, y que por tanto, si alguien que amo se va, aunque me duela, yo soy capaz de sanar y volver a amar.

Seguir leyendo

Tu voto: