Vivir fuera de la consciencia, en piloto automático.

En muchas ocasiones, vivimos divididos, desconectados, separamos de nuestra existencia externa y de lo que sentimos internamente, como si ambos fueran espacios separados, sin puente que los una: pendientes del afuera, ignoramos nuestras emociones, desoímos nuestras intuiciones y ahogamos nuestras necesidades. O, por el contrario, amarrados a nuestros pensamientos sobre el pasado o el futuro, dejamos de estar atentos a lo que ocurre a nuestro alrededor por terrible o maravilloso que sea. En este artículo presentamos un video con un interesante experimento donde se comprueba que, independientemente de que en un contexto determinado esté ocurriendo algo extraordinario, en la cultura actual, las personas estamos tan enajenadas, que no nos percatamos de esa maravilla por ir encerrados en nuestras mentes, en nuestras preocupaciones y en nuestra prisa, lo que, tristemente, nos aleja de nuestra realizad humana, convirtiéndonos en simples máquinas autómatas.

Seguir leyendo

Tu voto:

La verdadera felicidad no cae del cielo, se construye.

Las personas resentidas, enojadas, frustradas y que no quieren crecer ni tomar la responsabilidad de su propia vida, se preguntan todo el tiempo cosas como: ¿por qué no tengo el puesto que me merezco?; ¿por qué no gano lo suficiente?; ¿por qué no encuentro al amor de mi vida?; ¿Por qué mi marido es tan insensible o mi mujer tan egoísta?; ¿por qué no logro sentirme bien conmigo mismo ni con los demás?; ¿Por qué la vida es tan miserable…? Efectivamente, la gente que quiere realmente salir adelante y ser feliz, se pregunta algo como eso o algo similar: ¿Cómo puedo sacar ventaja de este fracaso, de esta pérdida, de esta desilusión? ¿Qué lección me deja este tropiezo en mi vida?.
Lo cierto es que existen personas que, con muchos menos recursos que otros, salen adelante sin estarse preguntando por qué son pobres; por qué padecen enfermedades; por qué pierden a sus seres queridos; Por qué se tienen que enfrentar en soledad a la vida o por qué les faltan dos brazos o dos piernas.

Seguir leyendo

Tu voto: