Ser feliz con tu pareja no implica un esfuerzo enorme. Cuando quieres a alguien, las cosas se dan de manera natural. Lo importante es reconocer que una pareja necesita más que sólo amor para subsistir, requiere de atención, consideración, generosidad, reconocimiento, paciencia, aceptación. También es importante reconocer que tu pareja NO ES IGUAL A TI, y que, por lo tanto, no tiene necesariamente las mismas necesidades que tú ni tampoco la misma manera de satisfacerlas. Es necesario aprender a reconocer lo que el otro necesita y tratar, en a medida de lo posible, ayudarle a cubrir estas necesidades.
No veas el reto de hacer feliz a tu pareja como un deber, es mejor verlo como un deseo o una elección. Cuando le des algo a tu pareja, no lo hagas desde la obligación pues eso te generará enojo, molestia o resentimiento. Es mejor considerarlo un OBSEQUIO que le das al otro, a ese que amas, desde el cariño, el interés, el deseo de que esté bien y de que sea feliz… en pocas palabras, desde el amor.