La confianza se construye a través de la capacidad de tener coraje y valentía para ofrecer al ambiente lo que somos y lo que tenemos para dar. Podemos dar amor si somos capaces de amarnos, podemos apoyar si antes hemos sido capaces de construir el auto-apoyo.
No sólo podemos, incluso debemos poner al servicio de los demás los dones que la vida nos dio. Para poder encontrar el verdadero sentido o propósito de nuestra vida, es necesario aprender a reconocer nuestras fortalezas y ponerlas al servicio de otros, esa es una excelente manera de construir la felicidad.