Juzgarse a uno mismo o a los demás genera cierto tipo de actitudes y conductas como:
Aconsejar al otro para «que se de cuenta de sus errores».
Manejar a las personas para que piensen o actúen no como ellos desean o consideran que es correcto, sino que como nosotros pensamos que es correcto.
Discutir para tratar de convencer a otros de nuestra verdad negando la de ellos.
Y varias más.
